
Caminaba con pasos amistosos y contentos
por la calle tomada de la mano de tantas
historias y buenas noticias
derrepente despectivamente
fui atropellada por un auto rojo...
ese auto que me arrebato la tranquilidad de mis pasos
y aumento la angustia que traigo en mi pecho
Que indolencia de algunos y que empatía de otros.
Quede sin aliento, sin palabras, en mi alrededor hubo silencio
y luego un estruendo de voces y bocinas en mis oídos.
Ahora atada a esta sensación que molesta, adolorida y asustada
es solo un tiempo...será ese tiempo en que la realidad sabe agria...